Pintor cubano Manuel López Oliva impresionado con cultura andina

Para el destacado pintor cubano Manuel López Oliva, quien ofrece aquí una exitosa exposición de su obra, visitar Perú es la realización de un viejo anhelo, un encuentro con la cultura y la grandeza de los incas.

Desde las lecturas infantiles de La Edad de Oro de José Martí, cuando por primera vez supo de incas, aztecas y mayas, hasta sus estudios de arte en los que aprendió sobre el arte de los antiguos andinos y sus contactos con maestros y artistas peruanos, conocer estas tierras era para López Oliva casi un sueño acariciado.


Tal expectativa es el comienzo de una entrevista con Prensa Latina, en la que recuerda que el de los incas fue el imperio más poderoso culturalmente y más creativo, sólo equiparable con el antiguo Egipto.

El artista dice estar positivamente impresionado por haber comprobado sobre el terreno que esa cultura está presente, vigente, en los peruanos que trata durante su visita y conoce en sus paseos por Lima.

Deseaba venir al Perú también por mi amistad con artistas peruanos como Tilsa Tsuchiya -ya fallecida y una de las grandes figuras de la plástica peruana contemporánea- y Rafael Hastings, a quien lo vincula "una gran amistad y una cercanía estética" de la obra de ambos.

La presencia del creador cubano, sus pinturas efusivas en líneas y colores y sus personajes enmascarados, ha merecido destacadas reseñas en las páginas culturales de los diarios peruanos.
La exposición, Paradojas del Deseo, se presenta en el Centro Cultural Inca Garcilaso, del Ministerio de Relaciones Exteriores, que dirige uno de sus viejos amigos peruanos, el laureado poeta Antonio Cisneros.

López Oliva expresa su reconocimiento al centro y a su director, por la acogida dada a su muestra y la hospitalidad que le dispensan, así como al Ministerio de Cultura de Cuba y, especialmente, a la Embajada de su país en Perú, por haber hecho posible la exposición.

Se refiere en ese marco a la positiva relación entre el Estado cubano y los artistas, tema en el que ha tenido oportunidad de esclarecer en sus contactos en Lima, visiones erradas al respecto.

«Muchos creen que los artistas cubanos que vivimos en nuestro país somos invariablemente representantes o funcionarios estatales y eso no es así; los artistas cubanos tenemos autonomía como todos los artistas del mundo», señala, a tiempo de reivindicar su profunda cubanía.

Ante los prejuicios existentes en el tema por un deficiente visión de la realidad cubana, recuerda que la Constitución cubana es la única del mundo que tiene un artículo que establece
López Oliva aboga por un conocimiento más exacto y actualizado de la realidad de su país, para que la imagen de Cuba sea cabal y esté alejada tanto de los enfoques hostiles y negativos que promueve Estados Unidos como de los que son excesivamente idealizados.

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Fuente Juventud Rebelde